Existen varios
métodos y técnicas estupendos, sin embargo, los pruebas, y al final te das
cuenta de que contigo no funcionan. Conoces a gente, que los aplica y mediante
ellos alcanza resultados increíbles, ¿entonces tú por qué no?
Una de las razones
(la cual descubrí en mi caso) puede ser, que la mayoría de estos métodos requieren
fe absoluta por adelantado. Es decir, tienes que creer en tu propia capacidad,
en tu éxito, antes de empezar a actuar para experimentarlo. Y la mayoría de
nosotros tiene demasiados frenos internos como para poder hacer esto, nos falta
valentía para arriesgarnos, estando solos e inseguros, de que nuestro intento
salga bien. Estos obstáculos invisibles representan una brecha entre tus sueños
y tu realidad. Si esa brecha es demasiado grande como para atravesarla con un
salto, necesitas construir un puente para cruzar al otro lado. ¿Cómo se
construye ese puente? ¿En cuánto tiempo? ¿Tendrás energía y decisión suficientes
para terminarlo? Cuando lo hayas terminado ¿serás lo bastante valiente para
cruzarlo? ¿Tendrás la voluntad para actuar?
¿Será que el
coaching es algo diferente? ¿Qué pasa si lo empiezas lleno de dudas acerca de
su eficacia? ¿Será que funciona siempre y con todo el mundo, tal vez sin
esfuerzo?
Te aseguro que
todos lo hemos empezado sintiéndonos inseguros y preguntándonos si de verdad
iba a funcionar. Todos experimentamos que la fe, con el solo hecho de querer
tenerla conscientemente, no es posible lograr. Y cuánto más desesperadamente la
necesitas, y más te esfuerzas en tenerla, menos obtendrás de ella.
Justo por eso, la
mayoría de nosotros necesita a alguien a su lado. Siendo coachee, te das
cuenta, de que no estás solo, que los resultados del coaching no sólo dependen
de tu fe anticipada, si fuera así, el coaching no se definiría como el método
que te permite alcanzar objetivos mucho más allá de tus expectativas. La fe no
es requisito del coaching, sino un beneficio, que te llevas como regalo. Mientras,
tu coach es quien cree en ti y mediante su apoyo hace, que tu autoconfianza
crezca al nivel necesario para lograr los resultados deseados. Él te apoya desde
el principio en creer que es posible, que tú eres capaz y que te mereces lograr
todo lo que te propongas y sólo pide una decisión a cambio. Y esta decisión
consciente de abrir tu mente para el cambio y comprometerte para actuar en el
proceso, te permitirá desarrollar todas las habilidades, obtener todas las
herramientas que necesitas para experimentar el éxito y repetirlo en relación
con todas tus metas. Con actuar me refiero a actuar incluso si en principio no
crees, que dará resultado. Actuar si aparecen las dudas y actuar aun teniendo
malas experiencias o fracasos detrás de ti. Así y sólo así obtendrás lo que
deseas sintiendo la satisfacción de haber logrado todo por ti mismo, lo que te
brinda la oportunidad de ser consciente de tu capacidad de crear. La cual
significa un poder absoluto para enfrentarte a cualquier dificultad inesperada
en tu vida y te lleva a la sensación de prosperidad. El coaching es más que
aplicar técnicas, es un proceso de metamorfosis interno, -acompañado por el
apoyo adecuado-, y en que si te conviertes en una bella mariposa o no,
solamente depende de tu compromiso y valentía para vencerte a ti mismo una y
otra vez.
Veamos la pregunta de
nuevo: ¿Será que el coaching es algo diferente? Sin duda. Es un baile en
pareja, donde tienes que dar el 100% de ti mismo, sin embargo donde está
permitido equivocarte, fallar a veces, sin que te caigas. Tu pareja de baile te
deja elegir la dirección, el estilo, el ritmo del movimiento, se entrega a tu
voluntad, te acompaña, siendo tu apoyo, sin embargo te sostendrá cuando pierdas
el equilibrio, te guiará, cuando te equivoques en los pasos hasta que aprendas
a bailar con toda la seguridad del mundo primero en pareja y luego solo
también, hasta que sepas corregirte a ti mismo, hasta que seas tu propio acompañante.
Entonces te soltará, dejará que sigas
bailando en solitario, porque los dos sabéis, que estás preparado para hacerlo.
¿Necesitarás fe en
tu éxito? Por supuesto, pero la fe (autoconfianza) la puedes obtener y/o
aumentarla en el camino, como premio o resultado de tus actos y tu desarrollo
personal.
¿El coach hará todo
el “esfuerzo” para ti y tú obtendrás lo que quieras reflexionando sobre ti
mismo en tu sillón? De ninguna manera. Todo lo que logres, se hace posible,
porque tú das los pasos necesarios para conseguirlo. Recuerda, tu coach es tu
pareja de baile, que se mueve contigo apoyando tus movimientos, pero ni debe ni
puede mover tus miembros por ti.
Si quieres conocer
tus límites, sientes curiosidad por saber hasta qué punto podrías mejorar tu
propia vida (independientemente de sentirte contento o no con tu vida ahora
mismo) te pregunto; “¿Por qué no lo pruebas y descubres por ti mismo si el
coaching funciona?
Si tu respuesta es
ir en busca del coach adecuado para ti, y ponerte en contacto con él/élla de
forma inmediata, entonces lo creas en este momento o no, con el coaching
lograrás mucho más de lo que imaginas.
¡Que tengas mucho
éxito!